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| 2 Nefi 28:7–9, El Libro de Mormón |
| “Sí, y habrá muchos que dirán: Comed, bebed y divertíos, porque mañana moriremos; y nos irá bien.
Y también habrá muchos que dirán: Comed, bebed y divertíos; no obstante, temed a Dios, pues él justificará la comisión de unos cuantos pecados; sí, mentid un poco, aprovechaos de alguno por causa de sus palabras, tended trampa a vuestro prójimo; en esto no hay mal; y haced todas estas cosas, porque mañana moriremos; y si es que somos culpables, Dios nos dará algunos azotes, y al fin nos salvaremos en el reino de Dios.
Sí, y habrá muchos que de esta manera enseñarán falsas, vanas e insensatas doctrinas; y se engreirán en sus corazones, y tratarán afanosamente de ocultar sus designios del Señor, y sus obras se harán en las tinieblas.” |
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| Él desea perdonarte |
| “Hay ocasiones en que el sentimiento de culpabilidad es tan abrumador, que cuando el que se arrepiente mira a sus espaldas y ve la gravedad y la repugnancia de la transgresión, se da casi por vencido y se pregunta: ‘¿Podrá el Señor perdonarme alguna vez? ¿Podré yo alguna vez perdonarme a mí mismo?’ Sin embargo, cuando uno llega al grado máximo de abatimiento y piensa que se encuentra en un callejón sin salida, y cuando, en su impotencia, pero con fe, suplica misericordia a Dios, llega una voz apacible y delicada, pero penetrante, que susurra a su alma: ‘Tus pecados te son perdonados’”. —Presidente Spencer W. Kimball, doceavo Presidente de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días |
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