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Nos encantaría reunirnos contigo nuevamente. |
{{my.PersonalizeFirstName_Hi_SPA}} Como misioneros, nuestro objetivo es ayudarte a acercarte más a Jesucristo y encontrar más alegría. Pero sabemos que a veces, la vida se complica y es fácil perder el contacto. No te preocupes. Nos encantaría hablar contigo de nuevo cuando estés listo. Simplemente haz clic en el botón para enviarnos una alerta de que te gustaría que nos pongamos en contacto contigo: |
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‘Los misioneros me ayudaron a sentir el amor de mi Padre Celestial’ |
“Una de mis tareas en la universidad era leer el Libro de Mormón. Mientras lo leía y reflexionaba sobre él, mi deseo de acercarme a Dios crecía. Justo cuando comenzó el semestre, los misioneros me llamaron. Empecé a reunirme con ellos. Comencé a ver las bendiciones de tener el Evangelio en mi vida. Estaba más feliz, sentía que la luz llenaba mi corazón y veía el mundo con una perspectiva renovada”.
“Sin embargo, no acepté que había recibido un testimonio de la veracidad del Libro de Mormón. Decidí que realmente no necesitaba unirme a la Iglesia para continuar teniendo esta alegría, así que dejé de reunirme con los misioneros. En diciembre de ese año, recibí una llamada telefónica. Era de los misioneros, diferentes a los que había conocido”.
“Después de eso, me reuní con ellos dos veces por semana. Mi Padre Celestial ablandó mi corazón. Los misioneros me ayudaron a sentir el amor de mi Padre Celestial y buscaron convertirse en mis amigos, invitándome y ayudándome a venir a Jesucristo. Estoy muy feliz. La decisión que tomé de ser parte de esta Iglesia ha sido la mejor decisión que he tomado en mi vida.”
—Jeannie |
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Los misioneros quieren ayudarte a sentir el amor de Dios. |
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La oracíon nos fortalece |
Cuando Erik y su esposa descubrieron que su hija tenía necesidades especiales se sintieron solos y asustados. En su desesperación, Erik clamó a Dios y empezó a tener paz. Aunque sabía que su hija tenía problemas de salud él pudo sentir que las cosas estarían bien.
Cada familia tiene desafíos distintos. Dios nos conoce y desea ayudarnos. Cuando tengas alguna prueba, sencilla o difícil, puedes orar y recibir fortaleza. Paso a paso, día tras día reconocerás que no estás solo y que Dios contesta las oraciones de tu corazón. |
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